El chacal, por María Peña Vílchez

Chacal (Wikipedia).

El chacal es un miembro de cualquiera de tres especies de mediano tamaño de depredadores del género Canis. Los chacales ocupan un nicho ecológico similar al de los coyotes en América del Norte. Las tres especies son depredadores omnívoros. El chacal tiene mucho de parecido con el lobo: es ágil, fuerte y vivo pero muy cobarde. Tiene aspecto de perro, con un tamaño mediano y una altura comprendida entre 35-45 cm; su peso es de unos 8 a 12 kg.

La característica principal es que su pelaje es generalmente de color amarillento, y tiene una mancha negra en el lomo que va desde la cruz hasta la base de la cola que está salpicada de pelos blancos. La cabeza, los costados y las patas son de un color marrón rojizo; la boca y el pecho es de color blanco.

Las orejas son puntiagudas y su cola, bastante peluda, es de color marrón rojizo en la base y negra en el resto. La nariz del chacal no es tan puntiaguda como la del zorro, pero sí más que la del lobo común.

Es un animal nocturno y puede ser carroñero si es necesario. Los dientes caninos curvos están adaptados para la caza. Las patas grandes y los huesos largos los preparan físicamente para carreras de larga distancia; son capaces de mantener velocidades de 16 km/h por extensos períodos de tiempo. 

Su hábitat es muy extenso, desde las sabanas semiáridas y desérticas, hasta zonas arbóreas. Vive en solitario o en parejas que permanecen juntas mucho tiempo; en la sociedad de los chacales, una pareja monogámica defiende su territorio de otras parejas. Estos territorios son defendidos vigorosamente desafiando a los intrusos y marcando su territorio con su orina y sus heces. El territorio puede ser lo suficientemente grande como para albergar adultos jóvenes que están con sus padres hasta establecer sus propios territorios. Tienen tres o cuatro crías, que nacen después de unos sesenta días de gestación. Su alimentación es muy variada; comen roedores, pequeños mamíferos, reptiles, jóvenes antílopes y frutos; también se alimentan de carroña.

Son muy dañinos para los campesinos, pues cazan sus aves de corral y otros animales domésticos. También pueden vivir de la basura que hay en las calles de las aldeas.

El lobo etíope es también llamado chacal.