viernes, 24 de abril de 2020

La lechuza común, por David Fernández López

La lechuza común, o lechuza de campanario pertenece a la especie Tyto alba. Es un ave rapaz nocturna, que se incluye como todas estas aves nocturnas, en el grupo de los Strigiformes, con varias divisiones. La familia Strigidae incluye a los búhos, los mochuelos, autillos y cárabos entre otros. La familia Tytonidae comprende solamente a las lechuzas.
Lechuza (Tyto alba). Fotografía de Rubén López Baena.
Su hábitat está ligado a núcleos urbanos rurales, donde se reproducen, pero necesitan zonas de cultivo abiertas donde cazar, por ejemplo, en los cortijos abandonados de la vega de Granada, e incluso a veces, en la catedral de Granada.
La lechuza común se alimenta principalmente de pequeños roedores como los ratones, musarañas, topillos, etc. aunque algunas veces caza a algún insectos. La forma en la que caza es mediante vuelos rasantes silenciosos sobre los campos abiertos, donde escuche a sus presas, las cuales caza con sus garras. Una vez que caza a sus presas, se las traga sin descuartizarlas. Al no poder digerir ni la piel, ni el pelo, ni los huesos, regurgita esos desechos en la forma de bolas llamadas egagrópilas.
Los tres principales aspectos que diferencian a las aves rapaces nocturnas de las demás son:
1. El plumaje. Poseen un plumaje aterciopelado y sus plumas principales del ala están desflecadas, por eso tienen un vuelo tan silencioso. Además, en su cara tienen un disco facial en forma de corazón que actúa como un amplificador de sonido para localizar a sus presas con precisión.
2. La vista. Las rapaces nocturas poseen los ojos en la parte frontal de la cara y su visión en la oscuridad es casi del doble que un humano, además pueden girar el cuello aproximadamente unos 270 grados y mirar hacia atrás sin girar el cuerpo.
3. El oído. Es el principal arma para cazar de las rapaces nocturnas, ya que lo tienen asimétrico, es decir, que lo tienen a diferente altura. Esto les permite localizar a sus presas con mucha precisión, incluso son poder verlas.
Las rapaces nocturas son un gran aliado del hombre para el control de plagas de roedores e insectos. Por eso hay que protegerlas, en concreto a la lechuza común evitando usar venenos contra roedores. Por culpa del uso de venenos, las poblaciones de lechuza común han disminuido mucho en los últimos años. Para concienciar de este problema, la lechuza fue elegida ave del año en 2018 por SEO/Birdlife.
Pluma de búho real. Foto de Rubén Lopéz Baena.
Pluma de lechuza. Foto de Rubén López Baena.

Algunas características generales de las aves.
Pluma de búho real. Foto de Rubén López Baena.
Las aves son animales con simetría bilateral cuya principal característica es que tienen su cuerpo adaptado al vuelo. Tienen plumas, que cumplen dos funciones; por un lado les ayudan a volar como las de las alas o la cola; por otro les ayudan a conservar el calor corporal, como hace el plumón. No olvidéis que las aves son animales homeotermos, es decir, que mantienen constante la temperatura de su cuerpo. Entre estas adaptaciones al vuelo está que sus huesos son huecos, de manera que su peso sea menor. Otra característica importante es la presencia de un esternón muy desarrollado, la quilla donde se insertan los músculos que permiten el vuelo.
Las aves respiran, como sabéis, por pulmones, que se comunican con unas cavidades llamados sacos aéreos que favorecen la respiración a la vez que hacen que sean más livianas para el vuelo. Y con respecto a la nutrición, no tienen dientes, pero como podéis ver en la lechuza tienen un pico muy fuerte, adaptado a los distintos tipos de alimentos. 


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